Ahora que todos, o casi todos, tenemos las despensas llenas de legumbres, ocurre que no siempre sabemos cómo cocinarlas. Lo ideal es buscar formas sencillas y diferentes para llevar a la mesa platos nuevos, con ingredientes de siempre y de temporada. Por eso queremos proponerte esta deliciosa ensalada de lentejas y beterrada que te va a sorprender un montón.
Esta receta que les presentamos hoy la preparamos con lentejas Du Puy o lentejas caviar, pero también podemos hacerla con lentejas de Lanzarote o Fuerteventura. Por cierto, lentejas «tipo Lanzarote» no es lo mismo, aunque ahora en estos tiempo complicados, lo pasaremos por alto.
Es un plato sencillo pero delicioso, el elegante aroma de la beterrada asada, su textura y sabor, combinan a la perfección con el cítrico del aliño y, junto con la lenteja y el perejil, forman un plato redondo y exquisito, con una presentación llena de color. Espero que les guste.
Es muy fácil y divertida de preparar, ensuciamos poco y si sobra, mañana estará igual de rica.
200 gr de lentejas
2 remolachas/beterradas granditas
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cebolla
Sal gorda
Queso fresco de cabra, nosotros usamos Maxorata
150 ml de aceite de oliva virgen extra
El jugo de 1 limón
Medio manojo de perejil fresco
Sal fina ( al gusto )
1 cucharadita de zumaque ( podemos sustituir por la hierba aromática que más nos guste, cominos en polvo, orégano, tomillo limón, cilantro, también le podemos rallar un poco de cáscara de naranja o lima …)
Lo primero que haremos es encender el horno a unos 220º. Cuando esté caliente asamos las beterradas, con piel pero bien lavadas y untadas en un poco de aceite, se lo ponemos con las manos. Las asamos unos 30 minutos, debe despegarse la piel pero quedar firmes y duritas, al dente. Las pelamos y cortamos en gajos una vez asadas.
Picamos la cebolla chiquita y la ponemos en el caldero junto a las lentejas, que mejor si las hemos remojado unas horas previamente. Las cubrimos de agua y las cocinamos hasta dejarlas al dente, a media cocción las salamos, escurrimos desde que estén y dejamos atemperar.
Preparamos el aliño. En un bote mezclamos todos los ingredientes del aliño, ( puedes guardar un poco del perejil picado para decorar) y emulsionamos.
Mezclamos las remolachas cortadas con las lentejas.
Picamos el queso fresco en bastones o daditos y asamos en una sartén a fuego vivo, que no se pegue hasta que se dore, no hace falta poner aceite.
Presentamos las lentejas mezcladas con la betarrada asada, aderezamos con nuestro aliño de cítricos, añadimos los daditos de queso asado, decoramos con un poco de perejil fresco picadillo y a la mesa.
La combinación de sabores es absolutamente deliciosa.
Atrévete a prepararla